Hablar de Valentino Rossi es hablar del más grande piloto que nunca ha existido en el campeonato del mundo de motociclismo y estas palabras no se las atribuye el redactor del texto, sino todo un campeón del mundo, cuatro veces campeón para más señas y, además, español, Jorge Martínez Salvadores, conocido por todos como "Aspar", quien se enfrentó carenado contra carenado con alguien que, a día de hoy, acumula nueve títulos mundiales.
"Para mí, sin ninguna duda, hablar de Valentino Rossi es hablar del mejor piloto de la historia del motociclismo y es así porque creo que no ha habido nadie como él, completo, agresivo, valiente, técnico, ambicioso, sinceramente, lo tiene absolutamente todo", afirma Aspar.
Rossi nació en la pequeña localidad italiana de Urbino el 16 de febrero de 1979 y desde muy jovencito creció influenciado por su padre Graziano, también piloto de motos y ganador de dos Grandes Premios del campeonato del mundo, de quien Valentino ha heredado muchas de sus excentricidades.
Jugó con los karts antes de pasar a las minimotos, pero rápidamente demostró su talento y de la especialidad de campeón regional y juvenil dio el salto a los circuitos para disputar y ganar el campeonato italiano de Sport Production en 1994 y el de 125 c.c. en 1995, temporada en la que también fue tercero en el europeo de la cilindrada.
Rossi debutó en el campeonato del mundo en el Gran Premio de Malasia en 1996, que se disputó en el antiguo trazado de Shah Alam, y terminó su primer año noveno con una victoria, pero ávido de triunfos, al año siguiente se convirtió en el piloto más joven de la historia en conseguir un título mundial, el único que tiene de 125 c.c., después de ganar nada menos que once grandes premios.
"Cuando Rossi y yo coincidimos en pista nuestras vidas y nuestras historias eran muy distintas, puesto que yo estaba en el zénit de mi carrera y él no hacía nada más que empezar y reconozco que con él en pista se revolucionó todo pues era un joven muy agresivo y valiente pero con el paso del tiempo ha sabido convertirse en un piloto, quizás el único, absolutamente completo", reconoce Jorge Martínez.
"Evidentemente su situación de entonces no es ni por asomo la de ahora, pero también es verdad que ahora Rossi es un piloto muy maduro y capaz de grandes hazañas y quizás uno de los pocos que verdaderamente sabe transmitir al milímetro a su equipo todo lo que siente sobre la moto y, lo que es más importante, además acierta siempre en sus predicciones", añadió "Aspar", cuatro veces campeón del mundo en las pequeñas cilindradas de 80 y 125 c.c.
"Antes era un piloto todo corazón, ahora además es técnico y esa es probablemente la gran diferencia respecto al resto de pilotos", afirma "Aspar".
No esperó mucho tiempo para subir a los 250 c.c., en donde acabó segundo su primer año y en 1999 se proclamó campeón con Aprilia para no esperar más tiempo y dar el salto a los 500 c.c. de la mano de Honda.
Fue campeón del mundo con Honda ya en el 2001 y nadie le hizo sombra ni con las motos de dos tiempos ni cuando entraron las motos de cuatro tiempos, pero el desamor con Honda le hizo fichar por Yamaha y ganar el título mundial con ellos ya en la primera temporada, 2004.
Su hegemonía en la categoría reina duró desde 2001 hasta 2005, ambos inclusive. Sucumbió ante los errores y frente al estadounidense Nicky Hayden en 2006 y con el australiano Casey Stoner en 2007.
En 2006 Valentino Rossi fue subcampeón del mundo por segunda vez en su carrera en la categoría reina, la primera fue cuando debutó en 2000, al perder el título en favor de Hayden por sólo cinco puntos y en el último gran premio, en Valencia, tras cometer un error en forma de caída de debutante.
Casi tan difícil resultó la temporada 2007, pues Rossi logró cuatro triunfos y varios podios, pero su talento se vio mermado por el rendimiento de sus neumáticos y no pudo ni ser subcampeón por un solo punto.
Desde 2008 y hasta la llegada del mejor Jorge Lorenzo en 2010, nadie ha podido contestar a su supremacía y ahora, en 2011, afronta como un debutante más un nuevo reto, cambiar de marca para dejar Yamaha y marcharse a Ducati con el mismo objetivo, ser campeón del mundo.
Valentino Rossi es, además, uno de los miembros más importantes del paddock y sus aficionados están por todo el mundo. Baste como ejemplo que no hace muchos años fue invitado a un salón de la moto en la India y en donde pilotos como Alex Barros o Loris Capirossi no habían conseguido llenar un aforo de 10.000 espectadores, "Il Dottore" congregó a más de 250.000 personas.